Gracias por
iluminar cada día nuestras vidas con esos dos soles azules chispeantes que
emiten tanta luz y brillan con esa intensidad. Encienden cada día mi
corazón y mantienen vivo el espíritu de mi padre. Se me
ensancha el alma cuando te oigo llamarme “mamá”; me suena a título nobiliario,
a premio Novel, a premio extraordinario. Es un honor ser tu madre. Que disfrutes
del día tan especial para ti y no lo olvides nunca. Naciste
especial, te lo mereces todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario